
“Los hijos fortalecen el matrimonio”… Ya lo creo: Es el Crosfit de la vida, el pentacathlon más duro… Si quieres saber lo que es un deporte de riesgo, ten un hijo. XD
¡Y es que tener hijxs te cambia la vida! ¿Para bien? ¿Para mal? Pues según el prisma con el que mires, pero la realidad es que te cambia, y ya está.
Si te ha cambiado tanto que tu relación de pareja se tambalea dale al play o sigue leyendo, quizás te sirva lo que te cuento.
Y no vamos a negar que los primeros dos años son muy hardcore. La adaptación de tu vida al completo a ese pequeñito ser que habéis creado es brutal.
De 0 a 100 en pocas semanas.
Y es intenso, 24/7 non stop, OMG (me da flato sólo de recordarlo).
Si fuera un deporte, sería extremo no te quepa duda. Extrema paciencia, extremo desvelo, extremo dolor físico (de parir y de las posturas imposibles para sostenerlo y dormirlo), extrema aceptación porque te cambia el cuerpo, y recuperarlo tiene su ritmo, seguro que es mucho más tiempo del que puedas llegar a imaginarte, si llegas a recuperarlo.
¿Sólo cambios para ella? No no, para el otro miembro de la pareja también (sea él o ella).
Repito, es cambiarte la vida 180º y de 0 a 100.
Y ahí estamos. Dos personas más perdidas que un pulpo en un garaje y que tienen que ubicarse cada uno en su situación y, a poder ser, mantener la homeostasis, el equilibrio para que la familia funcione.
Y llega un momento en el que habéis cambiado tanto y estáis tan agotados del sprint inicial que no reconocéis a la persona con la que vivís.
Los defectos, los fallos sobresalen.
Y aparecen los roces, los enfados, los mocos y zacas y las discusiones.. vaya, la guerra.
¿Por qué viene la crisis de pareja?
No viene de la noche a la mañana, no has dejado de amarlo y ya. Éstas son las posibles razones por las que tengas una crisis de pareja cuando acabáis de ser padres:
- Desequilibrio: Como ya te he contado antes, el cansancio, el hambre, los sentimientos de soledad. escasa o nula corresponsabilidad con las tareas del hogar. Poco o nulo apoyo por parte de familiares y amigos cercanos. Lo que antes funcionaba como tú querías ya no funciona, porque sigues siendo dueñx de tu vida, pero inconscientemente se la has cedido, se la prestas a tu hijx para que se críe como necesita.
- Tabús de confrontación: En una relación de pareja existen tabús. Me refiero que no estamos de acuerdo en todas nuestras opiniones. Esos temas incómodos para uno o ambos en la pareja y que, por el bien de la relación, no se nombran ni se provocan. Puede ser los suegros, la cuñada, el hobby carísimo, esa manía de no recoger lo que ha ensuciado… Y sobre todo, por encima de todo, la visión diferente que cada uno tiene de la crianza. Porque a cada uno ha recibido una crianza distinta y va a haber mucha presión para que la crianza de cada uno salga victoriosa para la educación del nuevo miembro de la familia.
- Estrés: La preocupación por la incorporación al trabajo, si habéis valorado una reducción de jornada, una excedencia, y si con esto llegaréis a final de mes. Darlo todo en el trabajo para que no tengan motivos y te despidan. Saber cómo le sentará a tu hijx el jardín de infancia, su adaptación y su relación contigo al adaptarse a la nueva situación. La falta de sueño, que esto no se acaba en los primeros meses, y agárrate cuando se constipa… Y también, pero no menos importante, la presencia de padres/suegros que se involucran más de lo que deseas.
Cómo salir de la crisis
Para empezar. Medita bien qué quieres, qué queréis hacer.
Porque de las crisis se puede salir fortalecido como pareja, si ambos lo deseáis. No es obligatorio seguir en una relación que hace aguas si alguno de vosotros le quiere dar punto y final.
Terminar una relación no es ninguna derrota. Y vuestrx hijx agradecerá que su madre y su padre valoren su propia felicidad antes que el sacrificio de la unidad. Le estaréis dando ejemplo de que él también tiene valía para encontrar su propia felicidad.
Pero es importante ser consciente de que vivís una crisis y que esta situación pasará, como todo en la vida. La persona de la que te enamoraste sigue habitando en él/ella y que lo único que ha cambiado es que se ha abierto completamente, ahora le conoces hasta lo más profundo de ser ser. Eso tiene mérito, bravo por vosotrxs.
Y si vuestra decisión es salir de la crisis de pareja más unidos y reforzados que nunca, aquí te van unas ideas para superarla:
- Conociéndote muy bien: Esto es un ejercicio para cada uno. Las crisis son la oportunidad perfecta para ponerle palabras a emociones y sentimientos que habían estado guardados, y tapados durante tiempo. Reconcíliate con tu infancia y celebra y goza la infancia de tu hijx.
- Llegad a los valores como familia: En el día a día las parejas mantenemos un diálogo de “equipo” para que la rutina salga a flote. Por eso, cread tiempo y mantened un diálogo trascendental en el que pongáis en común los valores por los que se guía vuestra crianza y vuestra relación de pareja. Conociéndolos y dejándoos llevar por ellos la convivencia será más fácil. ¿Y cómo se hace eso? Hablando, hablando y escuchando, escuchando.
- Reserva momentos individuales: Te estoy pidiendo un imposible, ¡¡¡lo sé!!! Pero es importantísimo para mantener la cordura y la paz mental. Si te sirve de pista, yo tengo un libro en el móvil y si tenía un momento de paz (mientras daba el pecho o jugaban en la bañera) podía leer un poquito, ese era mi momento. Es importante, ni que sean 10 minutos. Porque al final del día verás, que aunque has estado sin parar atendiendo a tu hijx has podido cuidarte un poquito tú. Recuerda, el autocuidado no es nada egoísta.
- Sé consciente de que es pasajero: “no hay mal que 100 años dure”. La crianza es intensa en los primeros años, pero verás que, poco a poco, empezarás a ver la luz del túnel. Desde que nació mi primer hijo, mi mantra preferido es “es teeeemmmporaaaallll”
- Quéjate con arte: Si hay alguna situación que se repite y te provoca malestar y necesitas quejarte porque ya no lo aguantas más, quéjate. Quéjate, pero no rumies. Si quieres saber la diferencia entre quejarse y rumiar te dejo aquí el post y justo abajo el vídeo.
Puedes probar a dibujar la situación de la que te quejas y acabar el ejercicio con la frase “cuando ocurre _____, me siento _______”.
Es posible que durante el proceso artístico y posteriormente, en el dibujo, encuentres detalles de la situación que te ayuden a ampliar tu información para abordar el problema y solucionarlo airosamente.
Espero que te haya ayudado, y que si estás pasando por una crisis de pareja, sea cual sea la decisión final, te haga sentir en paz contigo mismx.
Gracias por pasarte a leer. Siéntete libre para comentar.
Nagore says
Bravo👏👏👏👏la realidad tal cual
Maite Galán says
¡Muchas gracias! Me alegra que tú también lo veas así. Que sea duro no significa que no valga la pena, ¿verdad? Un abrazo!