Quiero compartir contigo un dato que me sorprendió cuando lo leí, hace ya un tiempo.
¿Quieres saber de qué se trata? ¡Te espero en el vídeo!
En mayo de 2013 la plataforma digital Today moms publicó los resultados de un encuesta relacionada con las manualidades que inspiran a través de las redes sociales. En ella confirmaban que el 42% de las 7.000 madres encuestadas sufrían lo que bautizaron “estrés Pinterest”.
Este estrés valoraba los sentimientos de infravaloración por la falta de habilidades o de creatividad, generando sentimientos de remordimientos y frustración por no alcanzar la expectativa de las imágenes que veían en Pinterest, por comprar y no hacerlo ellas mismas, o por comprar ingredientes caros y exclusivos para hacer algo que acaba en fracaso.
¿Qué es el estrés?
Aquí va un aporte anecdótico, que tanto me gustan.
El doctor austro-húngaro, Hans Bruno Selye, publicó su estudio “El estrés”, un estudio sobre la ansiedad. El estudio versaba sobre la capacidad de afrontamiento y adaptación de las personas cuando les sobreviene una enfermedad, accidente o lesión (estamos hablando de los años de la Segunda Guerra Mundial).
Convivía en una pensión de estudiantes con ingenieros físicos, y bautizó este estado de ansiedad inspirándose en el desgaste de los distintos materiales en el uso habitual. Era un símil de lo que les pasa a las personas.
Lo que descubrió más tarde es que su pronunciación no era la adecuada ya que el concepto que quería inspirar era el de “strain”.
Pero para cuando ya se dio cuenta y quiso rectificar la palabra “estrés” ya se había convertido en una referencia para la comunidad científica.
¿Qué es Pinterest?
Como imagino que sabes, Pinterest es una plataforma digital abierta en la que se comparten imágenes, artículos y frases inspiracionales. Es un tablón, un corcho digital en el que guardas y compartes con otros usuarios las imágenes que te inspiran.
Lo que quizás no sabes es que Pinterest nació como una plataforma para empresas. Antes estaba cerrada sólo para negocios, en la que se ofrecían los servicios de las empresas que pagaban por ese espacio en la red.
Por lo tanto, y esto es clave para entender la filosofía de Pinterest: Pinterest es un catálogo. Un catálogo donde los especialistas, cada uno en lo suyo, exhiben sus conocimientos y sus servicios.
Y puedes imaginarte, que si es un catálogo de venta de productos y servicios, publicarán su mejor versión. Todas sus buenas habilidades y sus mejores servicios para atraerte. De ahí que se haya convertido en la plataforma inspiracional para todos los usuarios de la red. Desde fotografías idílicas en familia hasta recetas de pasteles increíblemente originales.
Así que ya no sólo te atraen para que te interesen sus servicios, si no que te inspiran a creer que esos resultados están al alcance de todos. Y sí, al alcance de todos los que tengas esas mismas habilidades y conocimientos.
Amo y odio a Pinterest a partes iguales
Nos ha inspirado tanto que ha surgido en nuestra sociedad acomodada la “necesidad” de que todo parezca salido de Pinterest.
Y claro que nos gusta a todos rodearnos de belleza, pero tanto estudio de la composición y tanta barroquismo acaba molestando. ¿Por qué? Pues porque de manera inconsciente se activa nuestro modo de comparación y las emociones y sentimientos de inferioridad se activan.
¿Y por qué ahora hay que ponerle ojitos a la fruta de los niños? Porque es más atrayente. Te puede gustar más o menos esta respuesta, pero es la verdad. Y se debe al efecto que tiene en nosotros el “estímulo súper normal” que descubrió el zoólogo Nikolaas Tinbergen. Tinbergen descubrió cómo diferentes especies de animales se sentían más atraídos instintivamente por materiales que él creaba con materiales, que por los estímulos habituales de la naturaleza.
El pez espinoso se sentía más atraído por una maderita pintada de hembra que aparentaba tener la tripa más abultada (llena de huevos) que una hembra real, o atacaba con más virulencia a un trozo de madera pintada de rojo, como la barriga de otros machos, que a otros machos.
De manera que los estímulos creados con más saturación de color o con mayor tamaño, los estímulos basados en la naturaleza pero multiplicando sus características, son instintivamente más atrayentes que la propia naturaleza.
Y a nosotros, los humanos, nos pasa lo mismo, nos atraen más las dentaduras perfectamente alineadas que las dentaduras normales, o los cuerpos atléticamente proporcionados, a pesar de que no es una constitución habitual.
Así que, si para merendar a tus hijos le ofreces una manzana normal y una manzana decorada, no lo dudes, escogerán la manzana con un estímulo súper normal.
Por eso a tus hijos les encantan la fruta con ojitos, y no lo niegues a ti también te gusta más. Por eso te encanta el filtro de Instragram para atenuar arruguitas y por eso, también, te encanta Pinterest.
Pero el conflicto con Pinterest viene cuando en este frenesí de vida moderna, a una madre del cole, o a una compañera de trabajo, que le encantan las manualidades, se le ocurre hacer una celebración con todo lujo de detalle, y además detalles cuquis. Y esta situación aflora emociones y sentimientos en ti.
¿Por qué llegamos al estrés Pinterest?
Por una bolita de nieve que acaba siendo una avalancha. Empieza sutilmente con una leve comparación de lo que tú no has hecho, y el impulso irrefrenable de igualar o superar la apuesta. Esta comparación, que te estás haciendo sólo tú, despierta la envidia, porque la otra persona no para de repetir que ha sido “taaannn fáciiillll” montar esa celebración que cualquiera puede hacerlo. Y claro, aceptas el reto.
La envidia despierta al perfeccionismo, ese crítico que aparece sólo para decirte que no estás a la altura, ni ahora, ni nunca y que, si no te esfuerzas más, vas a ser el hazmerreír del año. Las expectativas de uno mismo, se mezclan con las expectativas que creemos que los demás tienen sobre nosotros.¿Qué puedo hacer?
Ahora que hemos llegado a la base de tu problema con Pinterest vamos a intentar salir airosos.
- Para empezar, no torturarnos con lo bien y fácil que les salen a otras personas las manualidades, ni las recetas, ni las poses para las fotografías. Cada uno tiene sus habilidades y a ti se te dan bien otras cosas que no forman parte del universo Pinterest. ¿Sabes cuales son? Respira hondo y disfruta de lo que sí eres capaz de crear de manera “taaan fáciiilll” como tu compañera su celebración. ¿No sabes cuales son? Descúbrelas, piensa en la actividad que, literalmente, las horas te pasan en un suspiro.
- Pregúntate por qué ha generado envidia. Busca qué tiene la otra persona que tú no, quizás carisma, quizás habilidad manual, quizás tiempo libre… Detecta qué es y traza un plan para conseguir lo que deseas. Transforma la envidia en fuente de acción y realízate.
- Desarrolla tu empatía. Tu compañera de trabajo ha organizado esa celebración para compartir su alegría contigo, olvídate de ti un segundo y conecta con su felicidad. Disfrútala. O quizás tu compañera ha organizado esa celebración para demostrarte que ella es mejor que tú. Pues conecta también con esos sentimientos y descubre que ella tiene una autoestima baja y necesita sentirse validada, sé compasiva, olvídate de ti un segundo y conecta con su necesidad de aprobación.
Y nada más por mi parte. Recuerda que Pinterest es un catálogo, una red social, donde todos mostramos nuestra mejor versión.
No somos recetas perfectas, no somos decoraciones impecables, no somos sonrisas eternas.
Gracias por tu tiempo. Siéntete libre para comentar.